Un hecho sin precedentes se registró en la historia del remo peruano. Las gemelas Valeria y Alessia Palacios obtuvieron el subcampeonato en el Mundial de Remo Sub-23 realizado en Varese, Italia. Además, Adriana Sanguineti se ubicó en el top 10 en una categoría muy complicada: 1X Peso abierto.
“Es la primera medalla mundial en remo olímpico que consigue el deporte peruano en toda su historia”, nos dice Valeria, con orgullo, acerca de la medalla de plata que obtuvo junto a su hermana en la categoría LW2- (peso ligero). Por su parte, Adriana quedó entre las 10 mejores singlistas de la competencia en la categoría de peso abierto. “La sensación es indescriptible. La entrega que tuvieron las chicas fue esencial; los resultados solo son consecuencia de su trabajo”, comenta Diego.
Diez días antes del inicio del Mundial, nuestras tres bogas, junto con el entrenador celeste Diego Mejía, llegaron a Italia para enfocarse de lleno en el certamen. “La logística de nuestro club permitió que tengamos los botes listos para entrenar cuando llegáramos”, cuenta Diego, quien también entrena a la selección peruana de remo.
Terminados los Juegos Bolivarianos Valledupar 2022 (donde obtuvieron múltiples medallas), nuestras bogas regresaron a Lima y, a los pocos días, viajaron a Italia. “Llegamos a Varese con anticipación, para aclimatarnos y entrenar mejor”, precisa Adriana. “La pista donde entrenamos estaba correctamente boyada; era la misma en que íbamos a competir”, indica Diego.
“Me siento con ganas de más. No esperaba ir al Mundial, pero el Club siempre nos respaldó y ahora quiero seguir compitiendo”, nos dice Adriana. En la primera regata en que participó, clasificó al repechaje. Posteriormente, obtuvo el cuarto lugar en la final “B”.
Las hermanas Palacios, en tanto, obtuvieron el primer lugar en su serie y clasificaron de forma directa a la final. “Todas las embarcaciones llegaron juntas; la diferencia entre una y otra fue de un segundo. Cuando la competencia terminó, no sabíamos si habíamos quedado primeras”, confiesa Alessia. “Diego la siguió desde un ángulo diferente y se quedó con la duda. Pero Alessia le escribió a mi mamá, que confirmó la noticia: habíamos quedado en primer lugar”, recuerda Valeria. “Mientras remábamos, sentíamos que nos alcanzaban, pero no queríamos voltear a ver al resto de competidoras porque corríamos el riesgo de perder”, añade Alessia.
Después del Mundial
Nuestra delegación celeste retornó a Lima el viernes 5 de agosto. Fue recibida por una comisión del Club, encabezada por Jaime Cornejo, presidente del Consejo Directivo, y José Antonio Tord, director de Remo. “El recibimiento fue lindo; sentí que la gente valoró lo que hicimos”, nos dice Adriana. “Somos de La Punta y allí también nos recibieron de la mejor manera; es histórico”, comenta Alessia.
Nuestras representantes agradecen a todos aquellos que las acompañaron durante este proceso. “Nuestra familia es el sustento, siempre nos apoyan en los traslados, las competencias, etc.”, dicen las hermanas Palacios. “Mi familia me apoyó desde casa, siguiendo las competencias por internet”, complementa Adriana. “También estamos totalmente agradecidas con el Club de Regatas ‘Lima’, porque desde que les dijimos que la meta era el Mundial y la medalla, ellos nos apoyaron en todo”, agregan las gemelas.
El futuro luce aún más auspicioso. “Queremos competir juntas en los Juegos Olímpicos 2024, pero no solo nos proponemos ir a participar, sino que buscamos lograr medallas. Ese es nuestro sueño”, finalizan Valeria y Alessia. Precisamente, el próximo torneo internacional que afrontarán nuestras tres bogas pertenece al circuito olímpico: se trata de los Juegos Odesur 2022, que se disputarán en octubre, en Paraguay. El podio espera por ellas.
¡Nacemos deportistas, nos preparamos para ser campeones!