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Nada, rompe sus propios límites, consigue medallas mundiales… ¿Qué inspira a un deportista como José Benigno a ir tras sus sueños? Para él, trascender su miedo a nadar fue clave para iniciar el camino que lo apasiona. Recuerda que, a los 8 años, se revolcó en una ola en el balneario de Chorrillos, mientras disfrutaba con su padre, Augusto Peñaloza, de un día de playa en la sede del Club. Desde entonces, se dedicó a practicar otros deportes, como básquet, fútbol y atletismo, en su colegio, el Santa María. Allá por 1942, incluso, se coronó campeón en diferentes torneos interescolares.

Las Regateadas nunca pasaban desapercibidas en el Club. José, aún ligeramente temeroso, ya había aprendido a nadar, así que se animó a participar en la celebración del centenario del Club, en 1975. La competencia estaba organizada por colores. Él, de rojo, sin mucha técnica ni experiencia, triunfó en la categoría Veteranos. “Ese logro me inspiró a incluir el nado en mi día a día, a la par de otros deportes en los que participé”,  recuerda José.

La salud y el bienestar siempre han estado presentes en su vida. Él mismo decidió predicar con el ejemplo: se graduó de médico cirujano (1959) y doctor de Medicina (1972) por la UNMSM. “Pero nunca abandoné el deporte. Competía todos los años en los torneos interfacultades de atletismo y natación”, agrega. Dentro de sus labores, solía atender a pacientes diabéticos, a los que les daba consejos vinculados a la actividad física y la nutrición. 

La natación mejoró la vida de nuestro celeste, especialmente a partir de los 70 años, cuando fue motivado por sus compañeros de nado para participar en la categoría Master. Se inició en la natación a nivel competitivo en el Campeonato Mundial Master realizado en Munich en 2000 y, poco a poco, comenzó a destacar: en el Mundial Master de Budapest, en 2017, consiguió el tercer lugar y, en el Mundial de Corea del Sur, en 2019, obtuvo el cuarto puesto, con 87 años de edad. “A medida que pasan los años, pueden surgir algunas enfermedades”, comenta José. “Yo he tenido accidentes de caídas o lesiones que han sido aliviadas gracias a la natación. Es un deporte al que le debo mucho y que pienso seguir practicando”. 

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Tres generaciones: Nino (hijo), Doménico (nieto) y José Benigno Peñaloza en la piscina de nuestra sede Chorrillos. Los dos primeros heredaron la pasión de José.Foto de Sanyin Wu.

UN GESTO DE INSPIRACIÓN

Para José, todos y cada uno de los certámenes en los que ha participado han sido sinónimo de aprendizaje y disfrute. Pese a ello, hay uno que no olvida. El 21 de septiembre de 2015 se encontraba en Arequipa, disputando un Campeonato Nacional  de Natación. Ese día era su cumpleaños número 83. “Los asistentes y el público me cantaron Happy Birthday”, cuenta José. “Ese día les prometí publicar un libro, a manera de retribuir todas las alegrías que me ha dado este deporte. Esa fue una de ellas”.

Escribir su obra le tomó cerca de cinco años. En “Nadar para una mejor vida”, no solo narra su trayectoria como deportista, sino que además aporta, desde un punto de vista médico, una serie de beneficios y perspectivas vinculados a la natación. ”Mi mayor deseo es inspirar a otras personas de mi edad a mejorar su calidad de vida y, en general, a que todos se animen a practicar este maravilloso deporte”, concluye José.

Si quieren saber más sobre la experiencia de vida de José Benigno Peñaloza y sus consejos para rendir a plenitud deportivamente, no dejen de venir este 9 de junio a las 7:00 p.m. al segundo piso del Hall principal de nuestra sede Chorrillos, donde dará una charla a propósito de su libro “Nadar para una mejor vida”.

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Escribir “Nadar para una mejor vida” le tomó cerca de cinco años. En este libro narra su trayectoria como deportista y aporta, desde un punto de vista médico, una serie de beneficios y perspectivas vinculados a la natación.